Russo: “Creemos que gran parte del movimiento se va a concentrar en torno a Rio Tinto”

Cada 28 de mayo se celebra en nuestro país el Día del Proveedor Minero, una fecha que reconoce el trabajo, la inversión, el compromiso y la resiliencia de quienes integran uno de los eslabones clave de la cadena minera: los proveedores de bienes y servicios. En la provincia de Salta, el festejo de este año encuentra al sector atravesando un momento complejo, marcado por la caída de la exploración, el freno en nuevas contrataciones y la transición hacia una etapa de operación tras la construcción de tres grandes proyectos de litio.

Para conocer más sobre el panorama actual, las expectativas de reactivación, el impacto de los permisos ambientales y el rol del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), en Salta Mining dialogamos con Federico Russo, presidente de la Cámara de Proveedores Mineros de Salta (CAPEMISA). Una conversación franca sobre los desafíos que enfrenta el sector, las gestiones en curso y el trabajo articulado entre las cámaras, el gobierno provincial y otras instituciones para sostener la actividad y defender la industria que, según sus propias palabras, “nos da de comer a todos”.

El 28 de mayo es un día especial para todos los proveedores...

Sí, la verdad que es un día especial porque se celebra el Día del Proveedor Minero, y sobre todo en este momento, en el cual venimos de la inauguración de tres plantas en la provincia de Salta y de un crecimiento muy grande en este último año, más allá de que ahora estamos atravesando una baja en la actividad. Pero también estamos celebrando que tres mineras de litio están saliendo a producción, están en una etapa de ramp up y, poco a poco, empezando a producir. También tenemos a la minera Mansfield y las empresas borateras que ya venían produciendo. Así que, la verdad, es un momento especial para Salta.

Como bien decías antes, hay tres empresas de litio produciendo, más las de oro y boratos. Sin embargo, el negocio tuvo que reconfigurarse, ¿no? Porque en esta etapa no hay una actividad intensiva en la contratación de trabajo, como lo es en la etapa de construcción. ¿Cómo está atravesando el sector este momento, donde hay obviamente una baja en la actividad? También disminuyó mucho la exploración, que genera movimiento entre los proveedores. ¿Cómo están actualmente?

Actualmente estamos atravesando un nivel de actividad muy bajo. Estamos en el orden del 40 % de nuestra capacidad operativa, haciendo un promedio entre los proveedores, según lo que venimos conversando. La caída del precio del litio ha impactado mucho, sobre todo en lo que es exploración, que prácticamente se desplomó. Lo que está quedando de actividad es la operación de las tres empresas de litio —POSCO, Eramine y Ganfeng— que están empezando. La etapa de contratación fuerte ya pasó, y al ser todo nuevo, con máquinas nuevas, el nivel de actividad que generan estas operaciones aún es bajo. Pero también tenemos la mina Lindero de oro, que está en muy buenos niveles, y algo de actividad con los proyectos de boratos. Sobre todo, estamos a la espera del movimiento de Rio Tinto, que ya empezó a movilizar parte del campamento y la planta de tres mil toneladas que posee. Creemos que gran parte del movimiento, en esta parte del año, se va a concentrar en torno a Rio Tinto, que está por comenzar la construcción de su campamento.

¿Ustedes cuándo piensan que va a empezar o qué información tienen sobre el inicio de Rio Tinto?

La información que tenemos es que el permiso de impacto ambiental para el campamento ya está aprobado, o sea que eso está por comenzar. Ya se solicitó y adjudicó la obra del campamento, que será muy importante para unas mil quinientas personas. Eso va a generar un nivel de actividad muy alto. Después, lo que estamos esperando es la aprobación del impacto ambiental para la construcción de la planta comercial, que se hará en dos etapas de alrededor de veintisiete mil toneladas. Sabemos que está en gestión, y eso también va a generar un movimiento económico muy grande en la provincia.

Federico, y con la Cámara, ¿en qué están? Sé que Pablo Robbio está teniendo una actividad muy fuerte, me lo crucé en varias capacitaciones que hicieron con los proveedores de la Puna. ¿Cómo están trabajando desde la Cámara?

Sí, Pablo está desde antes de fin de año, creo que comenzó en octubre. En general, la Cámara está teniendo muchísima más actividad, sobre todo después de la incorporación del gerente Pablo Robbio. Estamos haciendo actividades de networking entre los socios y organizamos presentaciones mensuales de empresas mineras, donde muestran sus proyectos, modalidades de contratación, y el listado de contrataciones previstas para el resto del año. Esto genera un contacto directo con los proveedores y, en cierta manera, una capacitación, ya que explican los requisitos para ser proveedor, dónde inscribirse, etc. Hace poco hicimos una presentación con POSCO en el hotel Alejandro I, y ya hay sesenta solicitudes en proceso para ingresar en su base de datos de proveedores. Todas estas actividades están generando más posibilidades para nuestros asociados, aunque no escapamos a la coyuntura, con un nivel de actividad muchísimo más bajo que hace un año y medio o dos.

Todavía hay dos proyectos que faltan aprobar en el RIGI. ¿Pensás que eso podría darle un impulso a la actividad? ¿Cómo ve el sector ese tema?

Sí, por supuesto, creemos que esos proyectos van a ser aprobados. Después quedará en manos de las empresas mineras la inversión y los permisos de impacto ambiental de la provincia. El RIGI es lo que da viabilidad a estos proyectos, y luego la gestión queda del lado de las mineras, con la provincia, para obtener los permisos y avanzar con las inversiones. Pero sí, creemos que es fundamental que se aprueben los RIGI y los permisos de impacto ambiental pendientes para que se empiecen a concretar inversiones.

¿Qué perspectivas tienen para el resto del año? Sobre todo, teniendo en cuenta la importancia estratégica que está cobrando el litio nuevamente...

Sí, Río Tinto vino a oxigenar muchísimo las inversiones, porque es una empresa que apuesta a largo plazo, y ya está dando señales de mucha actividad en Salta, con el nuevo campamento, a la espera del permiso ambiental para la planta comercial. Tenemos entendido que en Catamarca está por retomarse la fase dos del proyecto que había quedado en stand-by; luego de la compra por parte del grupo Arcadium, anunciaron que van a continuarla. También sabemos que podría haber movimiento en Galaxy. Y acá, en el mediano plazo, los proveedores tenemos mucha expectativa con el proyecto de cobre Taca Taca, que está en estado avanzado en el estudio de impacto ambiental. Esperamos que la aprobación llegue en el segundo semestre de este año, para que comiencen las inversiones. Ya empezaron con una campaña de perforación de unos 20 millones de dólares, que en este momento es una cifra importante. También están los proyectos de AbraPlata en Diablillos, Pastos Grandes, y la exploración en Arizaro de Eramine, todos esperando sus estudios de impacto ambiental. En torno a esos tres o cuatro proyectos está el futuro del mediano plazo para los proveedores.

¿Cómo manejan ustedes desde la Cámara el tema de la expectativa?

Se vive un clima de nerviosismo entre los proveedores porque el nivel de actividad está muy bajo. Como ya mencionamos: caída del precio del litio, proyectos a la espera de permisos, y la culminación de la construcción de tres mineras. Todo eso junto hizo que baje mucho la actividad. Los socios y proveedores están muy inquietos. Recordemos que se venía desarrollando una capacidad en Salta que demandó inversión, capacitación y empleo. Una caída tan brusca genera cimbronazos en las estructuras internas, tanto económicas como financieras, y también en el sostenimiento del personal. Tratamos de explicar que esto es coyuntural, y que debemos estar preparados para lo que viene. La Cámara está apoyando todo lo que favorezca la actividad. Acompañamos a la Cámara de Minería de Salta en la gestión de la reducción de la tasa de exploración, que por suerte el gobierno provincial actuó rápidamente y la redujo. También trabajamos en todo lo vinculado a los permisos ambientales, haciendo gestiones ante el gobierno. Estamos trabajando en conjunto con la Cámara de Minería de Salta y el gobierno provincial para recuperar el nivel de actividad.

Ojalá que se restablezca pronto, porque es un gran sector que demanda mucha gente. Pese a esta baja en la actividad, si hay algo positivo es que Salta sigue manteniendo el nivel de empleo dentro de las empresas mineras. Según el último informe de la Secretaría de Minería de la Nación, hay 5880 trabajadores. Ahora, en los proveedores, ¿cómo han podido mantener la cantidad de personal?

Sí, más o menos en esa cantidad estamos. Durante las construcciones de las tres plantas llegamos a superar los 10.000 trabajadores, y ahora debemos estar cerca de las 6.000 personas, lo cual es bastante. Pero sabemos que, ni bien retomen los proyectos, esto va a subir rápidamente. Así que, como decimos, es cuestión de aguantar hasta que se reactive la actividad. Por eso es tan importante el trabajo conjunto con la Cámara de Minería y el Gobierno. Pedimos priorizar, más que nunca, a los proveedores mineros salteños, porque sabemos que cuando hubo que poner el hombro por la actividad, lo pusimos. Y ahora pedimos que, con lo poco que hay, se priorice a los proveedores locales, que van a acompañar y defender esta actividad que nos da de comer a todos.

El Gobierno de Salta hizo un pedido al Gobierno nacional en Arminera para que también piensen en los proveedores...

Sí, tal cual. Necesitamos medidas que ayuden a paliar esta situación hasta que se reanude el nivel de actividad. Sería muy positivo contar con algún alivio fiscal o una medida que permita sostenernos este tiempo. Por otra parte, hay que orientar a las empresas que están en mejores condiciones a hacer un esfuerzo extra en las contrataciones con proveedores locales. Las mineras metalíferas están en mejor momento, con buenos precios del oro y otros metales, así que podrían poner un granito más de esfuerzo para sostener la actividad en este momento, especialmente con el precio del litio tan bajo.

Claro, por eso es tan importante seguir trabajando en nuevas exploraciones...

Sí, por eso siempre es importante para la actividad que esté diversificada la matriz de minerales. Esto es como el tema de los cultivos. Por ahí baja la soja, pero está alto el poroto y el productor sale adelante. Acá, el día que tengamos cobre con Taca Taca, plata con Diablillos, más todos los litios, ya vamos a tener, más diversificados los minerales y vamos a tener ya siempre una base de alguno de ellos. 

Fede, te agradezco muchísimo por tu tiempo. 

Muchas gracias por la entrevista, un gusto hablar siempre hablar con vos.