“Es fundamental introducir el cierre de mina en etapas tempranas de los proyectos”

Mario Santiago Juárez, ingeniero de minas y consultor de Minería, se destaca por su vasta experiencia y conocimiento en operación minera, planificación y cierre de minas.

Salta29/05/2024Salta MiningSalta Mining
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La provincia de San Juan, conocida por su rica tradición minera, ha sido cuna de destacados profesionales en el sector. Entre ellos, Mario Santiago Juárez, ingeniero de minas y consultor de Minería, se destaca por su vasta experiencia y conocimiento en operación minera, planificación y cierre de minas. Graduado de la Universidad de San Juan, Mario ha tenido la oportunidad de trabajar en diversas regiones de Argentina, incluyendo la provincia de Salta, acumulando un valioso bagaje de conocimientos y recuerdos.

En una entrevista con Salta Mining, Mario nos comparte su perspectiva sobre la ingeniería de minas, describiéndola como una ciencia económica que integra múltiples disciplinas de la ingeniería para la explotación efectiva y responsable de los recursos mineros. Nos habla sobre el papel crucial de los ingenieros de minas desde el inicio de un proyecto hasta su cierre, destacando la importancia de los equipos multidisciplinarios para optimizar el uso del capital y minimizar errores en el desarrollo de proyectos mineros.

Además, Mario discute la importancia del cierre de minas y las estrategias para asegurar que las operaciones mineras no dejen un impacto negativo permanente en el medio ambiente. También nos comparte su visión sobre el potencial minero de Argentina, especialmente en el contexto global actual, y la importancia de una legislación de vanguardia para atraer inversiones.

¿Quién es Mario Santiago Juárez?

Soy ingeniero de minas. Me recibí acá en la Universidad de San Juan. Es una universidad que es muy antigua. Y bueno, en el transcurso de mi experiencia, tuve la hermosa suerte de poder trabajar en casi todo el país, en muchas empresas mineras, incluido en Salta, de la que tengo hermosos recuerdos y experiencias. La ingeniería de minas en general, a mí me gusta definirla básicamente como una ciencia económica que se nutre de muchísimas de las ramas de la ingeniería y tiene, por supuesto, técnicas propias para poder explotar las minas. La ingeniería de minas es a la minería lo que el ingeniero civil es a la construcción de un edificio. El diseño de la mina, el plan de negocio de la mina y también las otras actividades conexas como la comercialización, la operación y finalmente el cierre de la mina. 

Claro, básicamente un ingeniero de minas está desde que se inicia el proceso de una mina hasta su cierre. 

Efectivamente. Mientras más interdisciplinarios son los equipos, mientras más temprano se conforman los equipos multidisciplinarios de tarea, menos errores se cometen en el desarrollo de los proyectos, más se optimiza el uso del capital. Siempre que hablamos de la actividad minera sabemos que el capital es una variable muy crítica porque es una actividad de riesgo. Conocemos aquella proporción de que cada mil proyectos que empiezan con una prospección, tal vez un par de ellos terminen con una mina en explotación. Eso significa que hubieron mil intentos, mil capitales que se arriesgaron y que no prosperaron a una mina en producción y que produjeron un repago sobre esa inversión. 

Es una inversión de riesgo...

Es muy importante decir, mucha gente por ahí no lo tiene presente, todo ese capital, todo ese capital de riesgo que ponen las empresas privadas, que ponen a veces los ahorristas a través del mercado de capitales, por más que no prosperen, sí generan ingresos para los distintos fiscos, tanto nacionales, provinciales como municipales. 
Eso también es un tema para hablar, porque está en el imaginario social de que una mina viene, extrae y se va. 
Es una actividad de una naturaleza de inversión inédita para la Argentina tradicional, pero es un pilar fundamental en el mundo. Es realmente un concepto muy muy ligero, tal vez está empujado por algún sentimiento equivocado de un pretendido sentido de nacionalismo, de decir, vienen, se llevan todo y no dejan nada, la verdad que es una simplificación que se aleja de la realidad. Las empresas, desde el momento cero, en que empiezan a conversar con las autoridades mineras, empiezan a invertir, empiezan a viajar, empiezan a consumir hoteles, montan una sociedad anónima, abren oficinas, alquilan camionetas, contratan a la gente local y empiezan a invertir. Y como te digo, la mayoría de esos, absolutamente, la mayoría de esos prospectos no van a llegar a convertirse en minas. Sin embargo, desde ese minuto cero ellos pagan IVA, pagan todos los impuestos a los combustibles, todos los impuestos laborales se pagan igual. O sea, las empresas de exploración, desde que un proyecto se empieza a perfeccionar, y en el mejor de los casos, esta pequeña proporción de proyectos que se vuelven minas, pueden pasar 15 años donde todas las inversiones son negativas, y después de la construcción, donde vienen la mayor cantidad de inversiones, tal vez unos 4 o 5 años después, empiezan a producirse ingresos que empiezan a repagar esos 15 años de inversiones. Es una inversión de largo plazo, cuando eso ocurre es muy redituable. 

En Salta y Argentina hay muchos proyectos de que están en distintas etapas ¿Pensás que estamos preparados para tal magnitud? 

Lo primero que hay que decir es que, a pesar de que hoy estemos discutiendo la RIGI en el Senado y se hacen tantas voces, desafortunadamente, y en muchos casos con bastante desconocimiento de la actividad, debemos decir que la Argentina ya cuenta con legislación de vanguardia respecto de la minería, que si nosotros tuviéramos, un prestigio de cumplimiento, de apego a nuestras leyes existentes, nosotros prácticamente no necesitaríamos un RIGI, el problema es que no tenemos ese prestigio internacional como cumplidores de leyes. A pesar de eso, hoy el mundo tiene un momento muy especial, que es no solamente la demanda de los metales preciosos, sino también de los metales industriales, como por ejemplo puede ser el cobre. Entonces hoy la Argentina, la verdad, es que tiene un gran número de proyectos en distinto estado de avance, desde proyectos de exploración preliminar, proyectos con estudios económicos preliminares terminados, otros con estudios de factibilidad, varias veces factibilizados, lo que nos hace únicos en la cantidad y calidad de conocimiento de muchos proyectos. Lo que nosotros tenemos que tener en claro, es que la decisión con la que nuestros gobernantes y nuestros representantes tienen que encarar el tema, la decisión y la responsabilidad con las generaciones presentes y futuras, es realmente única en términos del momento que vive el mundo. No todos los momentos se reproducen juntos, ahora estamos ante una muy buena situación, una muy buena expectativa de crecimiento de la demanda, de crecimiento de los precios y, por tanto, de aparición del capital para construir y operar las minas. 

El mundo está reclamando cobre y litio... Entonces, es un momento clave, como vos decís

La magnitud de los proyectos, como Alumbrera, como Agua Rica, como Taca Taca en Salta, como los proyectos del cinturón de cobre que tenemos acá en San Juan, es verdaderamente extraordinario. Afortunadamente, parte de los equipos económicos de la nación y los gobiernos mineros están tomando conciencia de la magnitud de las inversiones y de lo que impulsa a la actividad y a la sociedad en general la minería. La minería es un pilar fundamental. Hoy no lo referimos, pero los grandes países del mundo se han construido sobre la minería. Estados Unidos, los inventores de la minería, a cielos abiertos a gran escala. Ellos se han parado sobre la minería. Canadá se ha parado sobre la minería. Australia, ni hablar. Sudáfrica, mucho más. Y nosotros tenemos el potencial y ya hay muchos proyectos en un estado de avance muy importante. 

¿Y cómo se debe parar Argentina en este escenario? 

Lo que produce mayor cantidad de rentabilidad o de aprovechamiento de la riqueza mineral para todos los actores involucrados. Cuando me refiero a todos los actores involucrados, me refiero a los actores de la sociedad civil, al pueblo que recibe un repago por la riqueza que tiene nuestro país, que tienen nuestras provincias. Me refiero a los actores del sistema de gobierno, a la sociedad civil, a todos los proveedores, a todas las empresas de servicios, a todas las pymes que están asociadas a la actividad, a los inversores, aquellos que vienen arriesgando este capital durante todos estos años que hemos conversado. El sistema con menor influencia del Estado ha probado que produce más rentabilidad para todos los actores involucrados. En este sentido, el modelo de Perú, que tiene sus defectos, que hay que corregirlo, es un modelo que se acerca mucho a un modelo que promueve la inversión minera. La participación del Estado en las empresas, en la minería, siempre que se administre con criterios de eficientización, también produce una rentabilidad que los gobiernos pueden aprovechar para mejorar a sus comunidades, para mejorar la infraestructura, para mejorar el ciclo social, para producir esta movilidad social ascendente que todos reclamamos. Pero la administración estatal tradicional de la Argentina probablemente no ha funcionado. Entonces, el modelo estatal no es malo. Lo que es malo es nuestra forma de administrar. 

Hay personas que está trabajando con la Bolsa de Valores de Argentina para que la gente común, que tenga unos pesos ahorrados, en vez de ponerlo en un plazo fijo puede invertir en empresas que estén relacionadas con la minería. ¿Ves que se pueda dar ese paso? 

Absolutamente, absolutamente. Yo soy miembro de una sociedad que es el Colegio Argentino Ingeniero de Minas, con el Colegio Argentino Ingeniero de Minas y varios consejos de geólogos estamos, conformamos una organización que se llama el COEGIN, lo que persigue es justamente buscar el desarrollo del mercado de capitales mineros a través de la conformación de lo que se conocen como las personas calificadas, los famosos QP (Qualified Person), que son personas que respondiendo a una normativa internacional pueden certificar recursos y reservas. Cuando esas personas pueden certificar recursos y reservas, las bolsas de valores pueden tomar estas notas de certificación y reservas de las empresas para permitirles abrir su cotización en bolsa. Así es como funcionan todas las bolsas, las grandes bolsas mineras del mundo, como la bolsa de Toronto, la bolsa de Vancouver, el London Metal Exchange, a través de la certificación de las reservas y de los recursos minerales por parte de profesionales competentes. El gran secreto del mercado de capitales es que es popular. Ese es el gran secreto. Entonces, la respuesta corta es sí, absolutamente. Mientras más fuerzas se junten para poder avanzar en esto, hay que hacerlo, hay que hacerlo. 

Una empresa, cuando empieza la etapa de construcción de una mina, tiene que presentar un plan de cierre de mina, que obviamente son pasos que tiene que ir cumpliendo y el gobierno auditando. ¿Qué tan importante es el cierre de mina en actividades?

Es fundamental. Yo siempre digo que los primeros ambientalistas somos los mineros. Esto de la ética del trabajo implica saber cuáles son las consecuencias del trabajo que nosotros realizamos, cómo es que diseñamos las minas, cómo es que planificamos la explotación, cómo va a quedar la mina después del cierre de la mina, cómo es que vamos a asegurarle a las generaciones futuras lo que nosotros hacemos para aprovechar la riqueza para nosotros y para ellos mismos también, para las generaciones futuras, porque hay que ser justos, las generaciones futuras no solamente reciben una mina cerrada, van a recibir una sociedad más evolucionada, con más oportunidades, gracias a la riqueza de esa mina cerrada. Entonces, lo que nosotros decimos es que es fundamental. Una de las máximas que yo llevo en mi organización, con la que yo me gano la vida, es que nosotros introducimos el cierre de mina desde la misma planificación minera. Y desde antes, en las etapas tempranas, cuando un prospecto geológico se transforma en un proyecto de minero y alcanza sus primeros pasos de evaluación económica, como por ejemplo la famosa evaluación económica preliminar o PEA, ya desde ahí tiene que tener en cuenta aspectos relacionados con el cierre de mina, la evaluación de los lugares de implantación de las diferentes unidades de infraestructura de los proyectos. Si nosotros hacemos una evaluación económica de un proyecto y no contemplamos las tareas a ejecutar bajo la perspectiva del cierre de mina, en realidad vamos a estar viendo una parte del negocio. No vamos a ver las consecuencias. Entonces, vamos a estar haciendo un número equivocable. Entonces, introducir el cierre de mina desde las etapas tempranas de evaluación de los proyectos es fundamental. 

¿Y qué es el cierre de mina? ¿Y por qué se debe planear y tener presente desde el inicio?

El cierre de mina son las distintas actividades operacionales que conllevan a asegurar que las unidades grandes de infraestructura de mina no producen un daño permanente a otras futuras actividades en la medida de lo posible o no, o si esa zona de implantación tiene que permanecer acotada, si hay, por ejemplo, una transformación del área de la superficie que no va a volver a quedar igual que antes porque uno tomó la riqueza de ahí, la transformó en un bien para todos los actores sociales y eso tiene una consecuencia. La consecuencia es la transformación en parte de los paisajes, pero la responsabilidad del cierre de mina está en, primero, acotar lo más posible. La zona de implementación, de implantación de estos proyectos. Mitigar en la medida de las técnicas disponibles todas las consecuencias que pudieran producirse más allá de estas zonas de implantación. 
Contener los aspectos relacionados con los subproductos de las explotaciones minera. Entonces, la estabilidad física es uno de los objetivos a lograr, la estabilidad química es otro de los objetivos a lograr en un cierre de minas, la recuperación de la mayor cantidad de las áreas de infraestructura posible y la recuperación se debe entender como tratar de dejar el escenario lo más parecido a lo que se lo encontró al momento de la explotación. Los mineros somos ambientalmente proactivos en el sentido de que todas estas cuestiones son tenidas en cuenta, no solamente durante la explotación minera, sino anteriormente durante todas las actividades, las etapas de la prospección y exploración, exploración avanzada y, por supuesto, después del cierre, cuando la actividad minera, cuando el recurso mineral se ha agotado, cuando ya no es económicamente posible continuar con la explotación y se procede a cerrar. Inclusive las actividades de cierre, desmantelar las plantas de proceso, llevarse todos los materiales, sacar los cimientos o, por lo menos, condenar en un área que no tenga valor económico, que no tenga valor biológico, que no tenga valor ambiental, poner los cimientos en determinados lugares, mapear las actividades, todos los costos relacionados deben estar planificados desde el comienzo.

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